Gastón Acurio, uno de los cocineros más mediáticos de Latinoamerica y absoluta autoridad en cocina peruana, ha desplegado su buen hacer culinario en ocho restaurantes en el mundo: Lima, buenos Aires, Santiago, Bogotá, Quito, Caracas, Méxido D.F y ahora también Madrid con Astrid y Gastón, un establecimiento repleto de buen gusto y cocina sorprendente.
Nombre: Astrid y Gastón
Dirección: Paseo de la Castellana nº 13 28046 Madrid
Teléfono: 91 702 6262
Página Web: http://www.astridygastonmadrid.com/
Tipo de cocina: Peruana fusión, con Andrés Rodríguez como jefe de cocina
Entorno: Dos comedores acogedores y elegantes, con una extraordinaria iluminación que propicia un ambiente agradable pero a la vez íntimo en cada mesa.
Servicio: Amable y cálido, dirigido por Raúl Rodriguez
Accesibilidad: Buena, tienen para bajar a uno de los comedores cuatro o cinco escaleras y un salva escaleras portátil al servicio de quien lo solicita
Ambiente: Parejas, familias y amigos, clase media-alta muy urbanos, al mediodía ejecutivos
Aparcacoches: Sí
Precio: Medio, con buena relación calidad precio
Fecha visita: Martes 5 de abril de 2011, servicio de cena
Cocina:
Nos dejamos aconsejar por el director Miguel Novoa, que tiene la amabilidad de aconsejarnos para que conozcamos mejor la carta. Nos sirven al principio de la cena un cesto de panes en el que hay pan de batata dulce, pan de queso, cilantro y cebollino, de patata y pan blanco, se acompañan con una salsa de queso fresco, rocoto, cilantro y aceite: empieza el desfile de color y sabor. Nos pedimos un Pisco, con buena temperatura y su justo punto de dulzor.
El aperitivo es un plato muy típico del país: «Causa limeña«, que al parecer se inventó en la guerra del país con los chilenos y se vendia para dar los beneficios a «la causa», a sufragar la guerra. Fuera de anécdotas, se trata de un puré de patata prensada sazonada con zumo de lima y acompañado de aji amarillo, dentro tiene una emulsión de aguacate y un topping de ventresca de atún, huevo cocido, escabeche de cebolla morada y crema de huancaína, hecho a base de aji: la salsa típica de la cocina peruana que se realiza con diferentes pimientos: una delicia. Pasamos a ese plato excelente de la cocina peruana : el cebiche, tomamos el Cebiche clásico (22 euros), que lleva dados de corvina marinados en una salsa: leche de tigre preparada a base de zumo de lima, reducción de pescado, jengibre y ají limo. Va acompañado de boniato, también llamado camote, y de maíz tanto fresco cocido como seco tostado: choclo y cancha se llaman respectivamente. Qué decir de este plato, ese sabor acidulado que tan bien domina la cocina peruana, textura, color… todo un universo: impresionante.
Continuamos con el Tiradito fusión (22 euros), una variación del cebiche: se utiliza el pescado en láminas (tipo carpaccio) y se marina en una leche de tigre de maracuyá, que en este caso lleva zumo de lima, reducción de pescado y zumo de maracuyá, va a compañada de choclo: toda la preparación muy integrada y elegante, con un suave toque picante que le da «chispa». Después llega el Aji de Gallina (27 euros), un guiso limeño tradicional preparado con tiras de pollo envueltas en una crema hecha a base de aji amarillo, crema de leche y queso, con patatas doradas, olivas y huevo cocido, que se acompaña con queso blanco y choclo el maíz cocido: la crema brillante, deliciosa, con un toque picante, muy sabrosa, las pechugas tiernas y jugosas, el arroz casi innecesario.
Probamos seguidamente el Lomo salteado (28 euros) donde se demuestra la influencia de la cocina china y japonesa en la peruana: el lomo es en realidad tiras de solomillo salteadas al wok con salsa de soja, vinagre, cebolla orada y tomate, acompañado depatatas fritas y arroz blanco, de nuevo virtuosismo en la salsa, un plato elegante donde la técnica es perfecta en todos los ingredientes: la carne tierna, las patatas en su punto pero, sobre todo, la salsa tiene un punto de soja que no resulta agresivo sino más bien como potenciador de la carne: excelente.
Terminamos con un postre cuyo nombre es Degustación Peruana (12 euros) perfecto para compartir, tiene Suspiro de Limeña hecho a base de dos tipos de leche, azúcar y vainilla y va acompañado de un Merengue al oporto, que contra lo que pueda parecer es muy ligero; también lleva esta degustación Picarones tradicionales, una especie de buñuelos preparados a base de una masa que contiene puré de camote y calabaza, y que se sirve acompañado de miel de chancaca: caña de azúcar y helado de nata: muy esponjosos y suaves: se comen solos, finalmente se acompaña el plato con un Sorbete de limón que lleva zumo de lima, granizado y espuma de posco sour, que limpia bien el paladar y tiene la acidez justa.
Acompañamos la cena además de con el Pisco inicial con una copa de vino blanco Baluarte rueda verdejo 2009 y una de vino tinto Viña Salceda Rioja 2006, ambos vinos muy acertados para los platos que tomamos.
Observaciones:
El restaurante cuenta con un menú degustación con ocho platos por 72 euros sin IVA ni bebidas, y otro menú tradicción con 5 platos -algunos de ellos entre los que tomamos- por 48 euros, también sin bebida ni IVA. Éste último muy aconsejable y a un precio bastante aceptable, dada la calidad de la comida y las cantidades servidas.
Calificación:
Astrid y Gastón Madrid es el mejor restaurante peruano de la capital por servicio, puesta en escena y calidad de producto, asi como originalidad en la presentación, que no sólo es vistosa, sino que además tiene en cuenta texturas, colores… Todo ello sin perder la esencia de la deliciosa cocina peruana, llena de matices y fusiones.
