Los helados no sólo son para el verano, y con más razón si hablamos de sorbetes y helados artesanos. En Madrid hay muchos sitios donde te van a deleitar con un delicioso y refrescante helado, o con un sorbete de mil sabores. Te costará elegir:
1) Rocambolesc
En cornete, en tarrina y hasta caliente. El pequeño de los hermanos Roca, Jordi, junto a su mujer, Alejandra Rivas, han traído a Madrid el carrito de los helados Rocambolesc, que salió del mejor restaurante del mundo, el Celler de Can Roca, para deleitar a pie de calle a todos los que disfrutan de este postre frío en las versiones más divertidas y deliciosas. En su espacio dentro de Gourmet Experience de El Corte Inglés de Serrano, 52 vas a encontrar seis tipos diferentes de helados, combinados con hasta 34 divertidos toppins para personalizarlo a tu gusto. Pero hay mucho más: magdalenas tipo cupcake helada o el postre láctico (receta del restaurante), con yogur y helado de leche de oveja de la raza ripollesa presentado en un kit con otros ingredientes para que cada uno se lo monte como prefiera.
2. Mistura
Elige un sabor, desde el clásico de chocolate al refrescante de mandarina, ponle toppings de fruta, cookies, mermeladas, miel, frutos secos… y, delante de tus ojos, los ‘amasarán’ sobre una piedra de granito helada (a -20º) para crear ‘tu helado’. Mistura ha revolucionado el mundo helado desde su heladería de Augusto Figueroa y les va tan bien que ya han abierto su segundo local, en la plaza Mayor (calle Ciudad Rodrigo, 6), con una zona chill out en el sótano. Además de los helados, prueba los sorbetes, con un 60% de fruta fresca, aptos para celíacos y veganos, sin azúcar, huevo ni lactosa.
3. La Romana
La Romana nació en Rimmini, Italia, en 1947 y ha llegado a Madrid hace dos años. Cada día elaboran de manera artesanal sus más de 60 sabores, cremosos, puros y ligeros, tan sólo con un 7% de grasa. Son creaciones y mezclas que nos transportan a la Italia más histórica, tradicional y sabrosa: con la crema Della nonna, los 150 años de la Unità d’Italia, Mascarpone al café, pesto de pistacchio, panna cotta… ¡Mama mía!
4.- Gelati Pino
También destilan sabor italiano los Gelati Pino, en el Café Pino (Plaza de la Moraleja), que han fichado a Giacomo Schiavon, el maestro heladero de la mejor heladería del mundo, la Sorbetteria Castiglione en Bolonia. ¿Qué vas a encontrar? Pues desde los sabores clásicos de chocolate, a base de cacao natural al 70%, vainilla de Haití, nueces de Macadamia, pistachos iraníes o dulce de leche, hasta otros sabores más sorprendentes y curiosos como el de quesada de guayaba, crema catalana, arroz con leche, almendra y café o el de mascarpone con gianduja. Para compartir, te ofrecen un cubo de helado con medio litro para colocar en el centro de la mesa y disfrutar de lo lindo probando todos.
5. Heladerías Due
La apuesta de las Heladerías Due (en Alcobendas) es la de elaborar y vender buenos helados, artesanos y deliciosos. Cuentan con obrador propio y una línea gourmet con productos exquisitos, algunos exóticos y con denominación de origen: Raimat con maracuyá, Chocolate Gran Cru, Sorbete de pera con Calvados, Crema Birmana… Puedes pedir tu helado en cucurucho si eres celíaco, porque tienen conos sin gluten. Los helados tampoco llevan gluten y hay algunas variedades sin azúcar. Nuestra recomendación: vainilla, estraciatella y mango.