Hace unos días Dolores Frías, directora de la oficina de Turismo de Israel en España, comunicaba la apertura gradual del país al turismo internacional, tras meses de restricciones a causa de la pandemia. Y lo hizo de la manera más original, apetecible y sabrosa posible: con un delicioso cocido madrileño cocinado, estilo kosher, en el restaurante “El reloj de Harry y Sally”.

¿Pero cómo se prepara exactamente este peculiar cocido? El chef del restaurante, Juan Pozuelo, explica que aunque los pasos a seguir son los mismos que en la receta tradicional, en su preparación solo se han utilizado aquellos productos autorizados por la kashrut, es decir aquellos que los preceptos judíos determinan como alimentos aptos para el consumo, los denominados alimentos kosher. Conforme a esta norma, se han sustituido las carnes de cerdo y embutidos propios del nuestro por otros productos cárnicos como son, la gallina, el vacuno, el cordero, el ciervo o chorizo de ternera. El resultado es un plato igualmente sabroso, con los mismos sabores pero notablemente más ligero y de muy fácil digestión, ya que las carnes utilizadas son bastante menos grasas.

El origen de este plato es bien antiguo y existen guisos similares en todo el mundo. En la cultura judeo-sefardí proviene concretamente de la “bacina”, un plato de garbanzos y cordero que se cocinaba a fuego muy lento los viernes, víspera del Sabbat, un día sagrado en el judaísmo.
La guinda a la velada la puso la deliciosa mousse de chocolate, elaborada con yema de huevo, preparada por los cocineros del Rabinato de Madrid.