El pescado es uno de los alimentos más versátiles que tenemos en nuestra dieta, ya que se puede consumir de múltiples formas y aporta grandes beneficios para la salud gracias a que son ricos en propiedades como el colágeno, fósforo u omega-3. Tiene multitud de posibilidades tanto en sus aderezos (salsas, especias, etc…) como formas de cocción (horno, al vapor, asado, etc…). Es mucho mejor consumirlo de la manera más fresca posible, y para asegurarte de ello te ayudaremos a identificar cual es el pescado más fresco a la hora de acercarte por la sección de la pescadería con unos sencillos trucos.
Aspectos a apreciar en la frescura del pescado
Si quieres asegurarte de que el pescado que vas a elegir sea 100% fresco toma nota de los tips que te dejamos a continuación:
- La piel: debe primar un color vivo, reluciente, con humedad y un tacto suave, pero sin dejar que esté blando.
- Las escamas: tiene que estar bien adheridas al cuerpo del pescado.
- Las tripas: no deben apreciar hinchazón, ya que esto determina que el pescado se encuentra en estado de descomposición producidos por las bacterias que ya se han introducido en el alimento
- Los ojos: deben de estar abultados y con las pupilas de color negro. Si por el contrario parecen hundidos y con la pupila comenzando a blanquear y presentan mucosidades, o incluso un color rojizo significa que ya lleva varios días fuera del agua
- La carne: suele ser más dura, firme y elástica, y se puede apreciar a simple vista. Pero, en caso de que no te fíes puedes presionar suavemente y no deberían de quedarse los dedos marcados.
- Las agallas: Tienen que ser de color rojo intenso y con brillo. En caso de que el pescad no sea freso estas serán de color amarillo o gris.
- Olor: Debe de prevalecer el olor a mar característico, pero a la vez agradable. Si comienza a oler mal significa que ya está comenzando a descomponerse.
Consejos para cocinar mejor el pescado
Para una dieta saludable no hay nada mejor que incorporar el pescado. Ya que, demás de ser un producto compuesto prácticamente de proteína, muy beneficiosa para nuestro organismo, tiene una excelente composición nutricional que nos aportará multitud de beneficios. Al ser una carne con gusto intenso, tierna y muy jugosa, hay que tener en cuenta algunos trucos que te dejaremos a continuación para queso se esfumen todas estas propiedades y poder sacarle el mayor partido posible:
Cuidar el punto de cocción
Para saber si el pescado está en su punto es importante tener en cuenta el tamaño y el grosor del pescado que hemos elegido. Te recomendamos que es mejor que le falten unos segundos de cocción a los que dice en la receta, ya que con su calor residual se terminará de cocinar y podremos tener ese punto jugoso, pero sin que quede crudo.
Usar superficies de calidad para cocinar el pescado a la plancha
Para hacer el pescado mediante esta técnica tenemos que asegurarnos de utilizar una plancha o sartén donde no se nos vaya a pegar el producto, ya que finalmente se nos quemará y tendremos que raspar para poder conseguir algún trozo entero. Dependiendo del tipo de pescado que hayamos optado para cocinar, la piel siempre deberá estar hacia abajo para impedir que el producto se rompa con facilidad. A ahora de servirlo, ayudarte con una paleta o espátula de madera para que salga el producto entero de la sartén o plancha y con los trozos enteros.
Pescado al horno; de lo más sano y sencillo
Por lo general, la cocción del pescado en en horno no debe llevar más de 20 minutos. Eso sí, sin tener en cuenta la guarnición que hayamos elegido y si esta también va a ser cocinada bajo esta técnica. En caso de que acompañemos el pecado con patatas y verduras, deberemos de cocinar estas y cuando le queden unos 20 minutos de cocinado incorporar el pescado.
Si hemos puesto el pescado entero, incluyendo la cabeza, esta será un buen detector para saber si el pescado está hecho o no. Según el viaje truco de la abuela, consiste en mirar al pescado a los ojos, y si estos han cogido un color blanquecino significa que ya está en su punto.
Como hacer un buen pescaito frito
Antes de bañarlo en una piscina de aceite hay unos trucos fundamentales para que esta técnica nos salga de 10. Primero, debemos de secarlo en papel de cocina después de limpiarlo para que absorba todo el líquido.
Por favor, no es necesario crear una charca aceitosa para sumergir a nuestro pescaito, solo hace falta la cantidad justa y necesaria para que cubra el producto. Debemos dejar que se haga por las dos caras para que quede bien hecho. Lo ideal para realizar esta técnica es elegir pescados de tamaños pequeños como boquerones, salmones o calamarcitos.
Ahora ya no hay excusas para no saber como elegir un buen pescado fresco o liarse con los puntos de cocinado de este alimento tan rico en nuestra alimentación.
