Los perritos calientes suelen ser una comida o cena rápida a la que recurrimos cuando no tenemos muchas ganas de cocinar o no disponemos de demasiado tiempo. Lo cierto es que no solemos poner el interés que merecen, ya que con unos pocos detalles podemos hacer un manjar de una cosa que la verdad es bastante simple. A continuación os daremos unos cuantos trucos con los que podréis hacer el hot dog perfecto.
1. No compres cualquier salchicha
No recurras a los paquetes extra baratos de salchichas para niños de supermercado. Si quieres disfrutar del perrito caliente perfecto ráscate un poco el bolsillo y compra un buen frankfurt o una salchicha vienesa.
Para un perrito caliente nosotros no recomendamos salchichas frescas, pues son mejores las prensadas ya que como veremos a continuación vienen precocidas.

2. Las salchichas no se fríen, se hierven
Primero de todo, las salchichas no se fríen, esto es un aspecto en el que muchos suelen fallar. Las salchichas ya vienen precocidas, por lo que solamente las tenemos que calentar. Basta con poner una olla con agua hirviendo y dejar las salchichas en ella durante unos 6 minutos. De esta forma quedarán tiernas y perfectamente hechas. Siempre puedes marcarlas en la sartén, pero eso no es lo que manda la norma. Si nunca has probado este método dale aunque sea una oportunidad, ya que de esta forma conseguirás un verdadero perrito caliente como los que puedes encontrar en un buen restaurante de fast food.
Pero claro, aquí queremos hacer el perrito caliente perfecto, por lo que te vamos a enseñar el que es nuestro truco: sustituir el agua por cerveza. En este caso el proceso será el mismo, la llevaremos a ebullición y metemos la salchicha dentro durante unos 6 o 7 minutos. Claro está el tiempo dependerá del tamaño, lo mejor es que lo vayas revisando poco a poco.
3. Es un perrito caliente, no un sandwich
En este punto lo que queremos destacar es la manía de algunas personas de cortar el pan por la mitad, cosa que no es así. Parece una tontería, pero a la hora de disfrutar el perrito influye este aspecto y mucho. Si no dejas una pequeña unión entre panes lo más probable es que todos los toppings se desparramen, engorronando el asunto y obligándote a mancharte las manos en exceso.
Antes de abrirlo puedes ponerlo en una plancha y tostarlo un poco, pero eso ya dependerá de gusto. Al contrario de lo que podrías hacer con una hamburguesa, tostando la parte de la miga, recomendamos hacerlo por fuera, ya que si calentamos el interior es muy probable que se separen ambos panes, cosa que hemos dicho que es catastrófica.

4. Los toppings le dan la magia
¿Qué es un perrito caliente sin cebolla frita? Esta es muy sencilla de encontrar en supermercados y le da un toque crunchy muy especial. En adición, puedes incluir pepinillos agridulces, tomate, bacon… lo que se te ocurra. Y con las salsas igual, aunque las más comunes son el ketchup y la mostaza.