La llegada del frío y el paso del invierno no parece que sea demasiado favorable para los cultivos. Sin embargo, hay ciertos alimentos que necesitan de esas bajas temperaturas para desarrollarse y ofrecer sus deliciosos frutos. Es por eso que os traemos una recopilación de cuáles son los productos que alcanzan su punto álgido en el mes de febrero.
¿Por qué consumir productos de temporada?
En primer lugar y sin ninguna duda porque el sabor, la textura, el olor y, en definitiva, la calidad de los productos consumidos dentro de su tiempo natural de cultivo es incomparable. Además, como estos alimentos se recogen en su punto justo de maduración, conservan todos los nutrientes y nos ayuda a hacer frente a agentes externos. Es decir, comiendo productos de temporada, que han superado en este caso el frío invierno, le estamos ofreciendo a nuestro cuerpo los nutrientes que más necesita.

Por otro lado, consumir alimentos propios de este tiempo favorece el comercio local y la producción ecológica; ya que estos productos se pueden cultivar cerca de nuestro entorno, sin necesidad de importación y con menos productos nocivos porque las plantas de temporada tienen menor predisposición a las plagas. De este modo, consumir preferentemente productos de temporada favorece la economía local y un precio justo para el consumidor.
Finalmente, este tipo de consumo tiene notables beneficios para el medio ambiente. Esto se debe a que no fomenta el cultivo en invernaderos ni la importación de los productos, lo que reduce notablemente la huella de carbono de la producción.
Verduras y hortalizas
El mes de febrero nos ofrece una increíble variedad de verduras y hortalizas como, por ejemplo: acelga, apio, brócoli, coliflor, espinacas, puerro, calabacín, zanahoria, espárragos y remolacha. Todas ellas perfectas para hacer caldos, cremas o potajes. Además, asistimos a la segunda floración de la alcachofa, un manjar en estas fechas.

Frutas
Aunque nos pese, llega el momento de despedirse de las frutas propias del otoño como el caqui o la granada. Para pasar a la temporada por excelencia de la fresa y el fresón. También es el momento del aguacate o el kiwi. Sin olvidarnos de los cítricos que nos aportan Vitamina C para luchar contra el frío: naranja, limón, pomelo o mandarina; aunque estos últimos están casi saliendo del calendario.
Legumbres
Llega el momento de sumar a nuestro menú los guisantes y tirabeques. A partir del mes de febrero es cuando podemos empezar a consumir los guisantes frescos. Incluso podemos incorporarlos crudos a nuestra dieta a través de ensaladas, para disfrutar de todo su dulzor.
