Andrea Tumbarello se ha convertido en un referente en el mundo de la gastronomía gracias al Restaurante Don Giovanni y a la Trattoría que tiene abiertas también en la capital (Calle Juan Bravo, 12), establecimientos que cuida y mima día tras día, por lo que ha recibido hace poco el Premio Marchio Ospitalità Italiana, un sello de calidad para los locales de comida italiana, galardón otorgado a Don Giovanni, restaurante que hemos tenido la oportunidad de visitar, un local que también dispone de una terraza en el exterior, ideal para el verano.
Nombre: Don Giovanni
Dirección: Paseo Reina Cristina, nº 23, Madrid
Teléfono: 914 348 338
Página Web: http://www.dongiovanni.es/
Tipo de cocina: Italiana
Entorno: Comedor muy acogedor, con luz ténue
Servicio: Muy correcto, ágil y atento
Accesibilidad: Buena
Ambiente: Ejecutivos al mediodía
Aparcacoches: No
Precio: Medio, buena relación calidad-precio
Fecha visita: Lunes, 13 de junio, almuerzo
Cocina:
Nuestra aventura en Don Giovanni comienza con Trufa sobre tostada de pan con aceite de trufa, haciendo honor a la cocina del chef, quien no duda en autodenominarse Andrea «Trufarello«, un apasionado del producto, que incluye en numerosos platos. Continuamos con un Carpaccio de Boletus (16,50€), no muy aromático, pero con una textura suave y turgente.
Más tarde, Andrea nos sirve los Huevos Mundial (14€), el plato preferido del internacional chef Ferran Adrià, que lo pide siempre que visita Don Giovanni, acompañados de Focaccia rústica y genovesa, exquisitos para degustar solos o en compañía de otras creaciones.
El siguiente plato ha sido la tapa más vendida durante la Semana Millesime de Valencia, por lo que se le cambió el nombre pasando de Huevo con trufa negra a Huevo Millesime, en honor al éxito conseguido (19,50€); excelente la calidad del huevo y una combinación tradicional que es un éxito seguro.
Seguimos con Minipizzas, la de Trufa negra (21,40€) y la Vegetal (13,40€), ambas excelentes gracias a la masa con la que se realizan, que Andrea deja descansar durante 48 horas para que consiga la perfecta fermentación, como nos confesó él mismo durante la entrevista que le hicimos en Con Mucha Gula.
El menú continúa con los Spaguetti alla carbonara l´originale (2,90€), montados por el propio el chef en mesa, con guanciale, yema de huevo, pimienta y queso pecorino, con un perfecto de punto de cocción, cremosos y muy elegantes. A continuación tomamos Ricciole ricotta e spinaci (12,90€), un huevo de codorniz servido sobre carne de hamburguesa, con mostaza roja y cebolla, un plato sorprendente debido al contraste de sabores.Por último, tomamos Spaguettis con salsa de tomate natural (9,90€), un plato con salchichas hervidas en vino Barolo y un toque de picante sutil muy agradable al paladar.
Finalizamos con Tiramisú y Panna Cotta (6,40€, cada uno), ambos correctos.
Maridamos la comida con vinos sicilianos, que conforman una amplia carta en Don Giovanni, aconsejados por las sugerencias del sumiller Senem García: un blanco, Etna Rosso 2008 y un tinto Fiano di Avellino 2009.
Observaciones:
El restaurante cuenta con una carta de más de 40 aceites y otra más con 12 sales diferentes, además de una amplia coctelería, de la que probamos la Ginebra Brockmans, servida en directo por Álvaro, el especialista en cócteles y ginebras del restaurante.
Calificación:
Lo que podría ser una sencilla trattoría se convierte, gracias a la personalidad de Andrea, en un lugar emblemático de la capital donde la cocina es un placer, también por la compañía del chef, que se ocupa de hasta el último detalle. Es uno de los mejores restaurantes italianos en Madrid y, seguramente, el de mayor personalidad.