Adaptar nuestra dieta en función de la estación en la que nos encontremos es una excelente idea. Así, además de mantener una dieta más saludable, y comprometida con el comercio local, resulta también ser una manera deliciosa de cuidar el medio ambiente. En las páginas de este bello libro de cocina, de la editorial Cinco Tintas, firmado por la escritora gastronómica, chef y nutricionista Alice Hart encontraremos más de 80 recetas vegetarianas, y algunas veganas, elaboradas con los ingredientes propios de cada temporada, organizadas según la estación. Platos sencillos y deliciosos para disfrutar de las verduras durante todo el año.

Recetas de temporada
Preparados de forma sencilla, con ingredientes accesibles que podemos encontrar en cualquier tienda del barrio, cada apartado- temporada- comienza con una detallada lista de las verduras propias de cada estación.
Por ejemplo:
- La primavera es la época de los espárragos, los puerros, la rúcula, las espinacas, las legumbres secas o el colinabo.
- El verano de las alcachofas, la berenjena, el hinojo, los guisantes, los pimientos, las legumbres fresca, los tomates o la remolacha.
- El otoño de las trufas, las castañas, los frutos secos jóvenes, del calabacín, las setas silvestres o los berros
- En invierno encontraremos coles de Bruselas, coliflor, achicoria, endivia, kale o patata.
Con todas ellas, la autora no invita a “comer un arcoíris diario”. Y es que “el color de cada verdura nos informa de qué vitaminas contiene: los vegetales verdes son altos en antioxidantes, el amarillo/naranja indica gran variedad de vitamina C, los rojos indican licopeno. Combinar los colores nos dará una amplia alimentación y aportación de las vitaminas necesarias para nuestra salud”.

Primavera y verano
Ahora, con la llegada del buen tiempo, apetecen platos más ligeros. Veamos alguna de las propuestas de El magnífico libro de las verduras.
El tajín primaveral suave preparado con caldo de verduras caliente, guisantes, tirabeques, aceitunas verdes y patatas nuevas, entre otros ingredientes; un bol de quinoa verdepara desayunar; remolacha baby con yogur y hierbas; tortilla de verduras al estilo vietnamita; una deliciosa ensalada de miso y zanahoria con guisantes crujientes y hummus de zanahoria; lasaña de verano; alcachofas con tomate, azafrán y ajo; espirales de calabacín y guisantes asadas con halloumi (un queso originario de Chipre) y tomate o un hojaldre de tomate asado, estragón y nata fresca.

Otoño e invierno
El otoño, es según Alice Hart, “la estación preferida de los cocineros”. Es entonces cuando llegan tesoros “en forma de calabazas, calabacines, setas y castañas hasta que, demasiado pronto, las primeras heladas hacen su aparición y endulzan los primeros tubérculos”, cambiando las cocinas de nuevo.
Los meses más fríos demandan platos reconfortantes. Es tiempo de asados, sopas y de guisos como por ejemplo una sopa de verduras agripicante, ligera pero muy nutritiva; o una crema de berenjenas asadas condimentada con hilbeh (una salsa de hierbas muy especiada); sopa de calabaza y maíz con queso de cabra; asado de cebolla de Figueras y pimiento con burrata y crujiente de chile; cuyas de calabaza asada con sambal de coco y tofu con sésamo; boniatos asados con sésamo, yogur y harissa o rigatoni gratinados con nabo, coles de Bruselas y nuez moscada.
Aunque también encontramos ensaladas como la templada de achicoria roja a la plancha con judías pintas o la de remolacha rayada, hojas amargas y halloumi con aliño de higos y cardamomo.
En definitiva, un libro inspirador para comer verduras los doce meses año sin complicaciones, de manera sencilla y realmente deliciosa.