El chef Sergio Sierra dirige una amplia propuesta con una carta con más de un centenar de platos donde no se escatima en el producto, tanto por calidad, como por frescura y preparación. Desde la trufa, la gamba roja, ostras o el caviar, sin descuidar esa cocina de kilómetro cero llena de sabor con guisos, arroces o carnes y pescados bien tratados desde un punto de vista técnico y bien presentados, haciendo especial foco en la creatividad de las guarniciones, donde Sierra se luce.
Especial mención hay que hacer a la bodega, apuesta de su propietario, Carlos Bosh (que también dirige el coqueto Teatro Bistró, ubicado en el antiguo ambigú del Principal de Alicante y con una terraza única), con más de 300 vinos, 80 de ellos por copas, lo que supone una apuesta arriesgada, pero a la vez, única en la ciudad. El propio establecimiento es embajador del afamado champagne Krug.
La propuesta, con platos como las Alcachofas con huevo, panceta ibérica y trufa o el Atún con ortiguillas de mar, los Arroces melosos con sepionet y boletus, el Secreto ibérico, las Quisquillas de Santa Pola o la Mojama de Atún, todo esta buenísimo… Tampoco hay que perderse la barra de cócteles, que te sirven junto a las tapas.
Un sitio único en Alicante y posiblemente de los más cosmopolitas de su área, donde comer, beber y disfrutar es muy fácil desde las once de la mañana hasta las dos de la madrugada.