El aeropuerto de El Prat acaba de inaugurar una ambiciosa ampliaciónEl aeropuerto El Prat de Barcelona inauguró la semana pasada su nueva terminal. Diez años después de que el arquitecto Ricardo Bofill esbozará la idea del proyecto, la T1 es ya una realidad. Tiene una superficie útil de 525.000 metros cuadrados, además puede acoger 55 millones de viajeros anuales, 25 millones más de los que pasan por El Prat ahora, operar 90 vuelos a la hora y servir de base para 800 compañías.
Es casi un nuevo aeropuerto, y cuenta con 166 mostradores de facturación, 101 puertas de embarque, 43 «fingers» (pasarelas de acceso a las aeronaves) y cerca de 12.000 plazas de aparcamiento. Para alcanzar la puerta de embarque, el usuario tiene a su disposición 49 tapices rodantes, 26 rampas mecánicas, 48 escaleras automáticas y 125 ascensores. Además, la nueva terminal dispone de 6.000 metros cuadrados en salas VIP, centros de negocios, una extensa superficie de ocio y restauración, gimnasio, peluquerías, «spa» y otros servicios para el viajero. Es una terminal para el futuro.
Su puesta en marcha será progresiva, y aunque se ha previsto que se llegarán a procesar 8.000 maletas por hora, en la primera jornada de trabajo se gestionaron unos 18.000 equipajes pertenecientes a unos 30.000 pasajeros.
