El Rincón del Sumiller

jgodoy02/03/2011

Historias del vino: unas veces las contaremos nosotros y otras será el propio vino quien nos hableEn esta sección que inauguramos, pretendemos acercar al gran público historias del vino. Unas veces las contaremos nosotros y otras será el propio vino quien nos hable. A veces de boca nuestra, otras de la de sus elaboradores y otras de boca de quienes lo consumen, contaremos historias. Historias verdaderas, humanas, cercanas. Queremos desnudar el vino para vestirlo de sensatez y cordura. Desproveerlo del halo elitista y lejano que a veces nos hace sentir fuera de lugar si no apreciamos según que característica. El vino está hecho por personas para personas. Al final es así de fácil.

El vino tiene un idioma especial, distinto, único para cada uno. Es universal, es elegante pero sobre todo, es un lenguaje precioso, pues a cada persona le cuenta una historia. Aquí aspiramos a compartir las nuestras con ustedes y a que ustedes compartan las suyas con nosotros. Sin tapujos. Sin miedos. Esto son hojas en blanco, que todos escriben en las nuestras y nosotros en la de tantos.

Cerrar los ojos para que sean el olfato y el tacto de nuestro paladar quienes busquen las respuestasMerece la pena acercarse a esta puerta que les mostramos con humildad, para intentar comprender mejor a esa maravilla que la tierra nos ofrece. Y ya puestos, ¿por qué no cruzarla? Cerrar los ojos para aislarnos de nuestro alrededor, anular el sentido de la vista para que sean el olfato y el tacto de nuestro paladar los que busquen las respuestas a ese idioma que se nos hace extraño. Y después, que nuestra memoria mantenga todo lo que el vino tenía que decirnos. Al fin y al cabo, aquí sólo les mostraremos palabras. Para oírlo en primera persona, hay que acercarse a la copa.

Desde este rincón, les traeremos cada semana las curiosidades de nuestras conversaciones con un vino, una bodega o una región, ¿tienen ustedes alguna conversación pendiente?