Los seis protagonistas de la cata en V de González Byass

Enofusión 2011: «la Gran Cata» de Gonzalez Byass

Con Mucha Gula29/01/2011

Antonio Flores y José Argudo, en plena cataSi de algo puede morir la recién nacida Enofusión, es de éxito. La Organización, por momentos, se vió desbordada ante la monstruosa demanda que existía para esta cata en V de uno de los Grandes de Jerez: González Byass. La profesionalidad del equipo salvó la situación, con no pocos sudor y lágrimas. En ella se presentaba sociedad el mundialmente conocido  fino «Tío Pepe». El mismo que varias generaciones han bebido y pueden beber, pero esta vez directamente sacado de la barrica.

Extraído abruptamente de la mejor bota en plena primavera, cuando la levadura en flor que lo protege del oxígeno está en plena explosión, se embotella. Sin ninguna otra manipulación. Su gran enólogo  Antonio Flores lo define como «El tiempo detenido en la bodega, silencio, sutiles aromas a flor, roble, albero, el mar cercano, la primavera inminente. La vida venenciada en una copa, luz, color sabor. Tío Pepe en Rama«.

Imbuido en animada conversación con el inquieto y enamorado de los jereces Brand Ambassador de Tío Pepe, José Argudo, me comenta que han querido sacar una instantánea del vino en su mejor momento. Una «foto-finish»  que espera se repita a partir de ahora todas las primaveras. Sólo 75 cajas conmemorando el 75º aniversario del Tío Pepe.

Pero mejor, vayamos a la cata en sí. Es una cata en V porque comienza con una fase vertical en la que se van desgranando las diferentes etapas de la crianza biológica (con velo en flor), y una segunda fase horizontal, llamémosla oxidativa, en la que se presentaban dos nuevos palos cortados: uno de añada y otro de solera.

Comenzamos la cata con un Mosto yema, que es el vino blanco producto de la palomino antes de comenzar su crianza (tipo Castillo de San Diego de Barbadillo). En este caso es un vino frutal, «blando», amable, con toques de manzana y algo de juguetón carbónico que, aún sin verse, se nota claro en boca. Magnífico dentro de su sencillez. Por primera vez se han embotellado unas cuantas botellas con objeto de comercializarlo.

Continuamos con un «Tio Pepe 3ª criadera«. En este caso catamos un estadio intermedio del Tio Pepe. Un fino «a medio hacer».  El anterior mosto, ya encabezado a 15 grados, comienza a adquirir junto a la fruta los aromas característicos a acetaldehído de los jereces. Ya se muestra salino y posee un toque de frutos secos propios de la variedad palomino fino.

Los seis protagonistas de la cata en V de González ByassTio Pepe en Rama. La estrella a priori de la cata, de un amarillo pálido, muestra una cierta opalescencia que no es sino la turbidez de las levaduras en suspensión. Un importador británico comentaba que como consejo de consumo en la botella  se podría poner un «Agitar antes de beber«.

Crianza biológica pura «de alta expresión» en la copa. Notas de panadería acompañadas por aromas a frutos secos, sabor limpio y sequísimo. Mucho más que un Tío Pepe y con un componente emocionante, sabiendo que lo que nos estábamos bebiendo era un momento, una foto, en el tiempo del vino. Se recomienda consumir como máximo a los tres meses de su embotellado, y lo antes posible una vez abierta la botella, tipo LBV de Oporto.

Amontillado Viña AB 3ª criadera

Con este vino llegan a la mesa de cata los preciosos tonos ámbar, llegan las avellanas y almendras sin estridencias. De forma elegante, se despliegan los aromas de levadura y las trazas de madera noble. Todavía  un poco desestructurado pero avanzando las formas de su hermano mayor.

Amontillado Viña AB

El AB terminado con sus aromas punzantes. Disminuyen un poco los aromas de crianza biológica, se incrementan los de frutos secos y en boca aparece un todo como conjunto perfectamente ensamblado.

Del Duque Amontillado VORS

La tonalidad ambarina del AB se oscurece en este vino con crianza superior a los 30 años. No existen los picos de otros vinos viejos de Jerez, aromas a iglesia antigua debajo de  frutos secos tostados y, sobre todo ello, una redondez impecable. Un gran “Very Old Rare Solera” Amontillado.

Añada 1982 Vintage Sherry

Hace su puesta de largo en Madrid esta nueva añada de palo cortado, un vino entendible debido a su amabilidad en boca, pero que se deja explorar por gente más curtida. Gran profundidad con notas de cáscara de naranja y pimienta roja. Amoroso, intenso y larguísimo de la forma que sólo un gran Jerez puede serlo.

Leonor

Otra novedad de la bodega Jerezana, y con esta van tres. Ámbar con tonos dorados y ribete ocre dice la Bodega y doy fe de que tiene razón. Otro palo cortado amable y serio. Profundo y de paso ligero en boca. Ying y Yang en un mismo vino. Gran Palo cortado

Felicitar a la Bodega por lo impecable y el alto nivel de la cata, a José Argudo por su pasión, su conocimiento y su saber hacer comercial y al quizá el enólogo más dogmático del Marco: Antonio Flores,  maestro  del vino y de  la comunicación.