Cómo nos gusta que se mantengan las tradiciones, y si son dulces, ¡mejor! Nos acercamos a algunas de las mejores pastelerías del país donde ya tienen los escaparates repletos de estas recetas tan típicas de esta época del año.
Horno de San Onofre

El invierno llega al Horno de San Onofre con el aroma a los buñuelos de viento. Es una de las pastelerías más castizas donde puedes degustar postres madrileños tradicionales como las rosquillas de Alcalá, los pestiños, las torrijas y los buñuelos… ¡que está buenísimos!

El repertorio de dulces de Todos los Santos se completa con un buen surtido de huesos de santo, incluidos los que hacen un guiño a Halloween y van rellenos de confitura (sangrante) de tomate. Y también los empiñonados, panellets, cubiertos de piñones, almendras, yema, coco… Las hermanas Ana y Mónica Guerrero, al frente del negocio familiar fundado por sus padres en 1972, se desplazan a finales de septiembre hasta Alcoy (Alicante), para traer desde allí la mejor almendra que será la base de estos dulces y de muchos otros.
Horno de San Onofre (San Onofre, 3); La Santiaguesa (Mayor,73); La Tahona (Hortaleza,9), Hernani (Hernani, 7) y en San Onofre en El Mercado de San Miguel, de momento cerrado. Madrid.
La Mallorquina

Estos días, la Puerta del Sol de Madrid tiene el aroma de los buñuelos de la mítica pastelería La Mallorquina. Ocupa la esquina más golosa de la capital desde hace 126 años y si sus napolitanas de crema son el bollo más afamado de su obrador (y las palmeras de chocolate, la tarta de fresas con nata, las trufas…), ahora son los huesos de santo y los delicados buñuelos los más buscados: de nata, crema, chocolate, café, cabello de ángel, fresa, batata y dulce de leche.
La Mallorquina. Puerta del Sol, 8. Velázquez, 59. Madrid
Martina de Zuricalday

Los buñuelos de viento de Martina de Zuricalday son una auténtica delicia. Los rellenan de nata y de crema y son tan etéreos y exquisitos que es imposible comer solo uno. «Nuestra crema tiene una gran fama en todos los productos en los que la incorporamos: bombas de crema, relámpagos, tarta (Pantxineta, Fraketa...), pasteles (canutillos de hojaldre, Juanitas, Cuadrados…), y estos buñuelos resultan muy finos y delicados», nos cuentan desde Zuricalday. Pero la nata también es pastelera y ligera, así es que… siempre aciertas. Esta es una pastelería legendaria, inaugurada en 1830, con la sexta generación de pasteleros haciendo las delicias de clientes golosos. Además de los dulces clásicos (¡ay, esos bollos de mantequilla!) Martina Zuricalday se apunta a la moda de Halloween con dulces terroríficos que encantan a los más pequeños.
Martina de Zuricalday. Arcilla, 43 y otras direcciones en Bilbao.
Pastelería Mallorca

Huesos de santo, buñuelos y panellets no pueden faltar en estas fechas en esta confitería tradicional madrileña que está a punto de celebrar su 90 aniversario. Mallorca sigue fiel al calendario dulce y durante estos días despacha (y vende también online) kilos y kilos de buñuelos pensados para agradar a todos con su variedad de gustos: nata, crema, chocolate, café, caramelo y avellana. ¡Irresistibles!
Pastelería Mallorca. Serrano, 6 y 10 direcciones más en Madrid.
Nunos

José Fernández es el maestro pastelero de Nunos y cada año consigue el «más difícil cada día». Cada temporada lanza una colección increíble de buñuelos, con los rellenos y formas más originales y deliciosos que puedas imaginar. ¿Qué ha preparado esta vez? Un homenaje al chocolate, su gran especialidad y pasión, con diferentes variedades como relleno estrella para este bocado. Para los menos amigos de innovar, su mostrador se llena también estos días de los buñuelos más clásicos y los huesos de santo.
Pastelería Nunos. Calle Narváez, 63. Madrid
Moulin Chocolat

Los buñuelos forman parte de esos dulces conocidos como ‘de sartén’,»y elegir un buen aceite es parte esencial de su éxito, nos adelanta Ricardo Vélez, de Moulin Chocolat, donde se esmeran mucho en este detalle y por eso sus buñuelos se fríen con el AVOE Alma de la Almazara Subbética, el mismo aceite con que se fríen las famosas patatas fritas de San Nicasio. Los rellenan de café, vainilla, chocolate, avellana y nata.
Moulin Chocolat. Alcalá, 77. Madrid
Escribà

El genial Christian Escribà es el maestro de las ilusiones pasteleras, por eso sus creaciones nunca pasan desapercibidas. El repostero y chocolatero siempre sorprende con las obras de arte azucaradas, incluso cuando toca hacer los dulces más clásicos, como los panellets o los huesos de santo. En Cataluña son más populares los empiñonados que los buñuelos, y ahí es donde Escribà deja volar su imaginación creando panellets de crema catalana, de tarta tatin o de tiramisú. Los huesos de mazapán también siguen su línea siempre transgresora.
Escribà. Gran Via de les Corte Catalanes, 546. Barcelona