Bebidas artesanas con cítricos

Hazte tus propios refrescos con infusiones, zumos o café

Proponemos sanas y exquisitas alternativas como bebidas frías, para escapar al consumo de refrescos, cañas o tintos de verano.

Redacción14/05/2019

La mayoría de las infusiones y zumos pueden servirnos como bebidas para verano si las preparamos correctamente. Lo más recomendable es refrescarlas con hielos que contengan su propio líquido, para que no se queden aguados.

Como fruta, mejor cítricos

Bebidas artesanas con cítricos

El agua resulta una bebida muy refrescante si le añadimos algún cítrico: el limón, la lima, la naranja o cualquier otro son perfectos. Un buen chorro de zumo de limón añadido a agua con gas a la que se incorpora hielo (que en este caso puede ser de agua normal) y, para adornar unas bayas o grosellas, se convierte en una bebida fantástica acompañada con una rodaja de naranja. Con jengibre, zumo de naranja, limón y granadas se hace una bebida también deliciosa, sólo hay que añadir hielos de zumo de naranja con unos granos de granada dentro.

No conviene olvidar que una jarra con agua a la que se añade el zumo de medio limón y varios trozos de cáscara de limón es un refresco perfecto si se guarda en la nevera. Si se le quiere dar un toque, podremos añadir una pizca de anís estrellado, así nos ayuda, además a hacer la digestión

Truco

Prepara tu bebida y ponla en una jarra en el frigorífico, echando una parte en la cubitera. Cuando quieras servirla, solo tendrás que añadir los hielos y todo el líquido será infusión, ya sea zumo, agua aromatizada o lo que hayas preparado.

Tés y tisanas, con hierbas mas refrescantes

Los tés fríos son muy sabrososTodas las infusiones se pueden tomar frías si, como decimos, se tienen cubitos de hielo de la propia infusión guardados en el congelador. El té que resultan más adecuado para tomar frío es el té verde, al que se le puede añadir hierbabuena y un poco de edulcorante. También se puede hacer un té de hierbas frescas mezclando tomillo, perifollo y borraja, además de la mitad, según la cantidad que se vaya a hacer, de romero y otras hierbas. Al conjunto se puede añadir un poco de ralladura de limón.

Los tés fríos son muy sabrosos si se les añade flores de jazmín o flores de tilo. Es más atrevido, pero podemos infusionar directamente algunos ingredientes y conseguir nuestro propio té frío de «autor». Si machacamos en un mortero tallo de limoncillo y jengibre y los infusionamos durante 10 minutos en agua caliente, sin cocer, después bastará con colarlo, ponerlo en una jarra y dejarlo enfriar. Hay muchas posibilidades, el límite está en nuestra imaginación y también en nuestros gustos.

Y si te atreves, añade fruta, jarabe o zumo de su mismo color a un té. Por ejemplo, a un té rojo, grosella; a un té negro chocolate negro rallado, a un té verde cáscara de manzana verde seca o a un té blanco jengibre… todo frío, para hacer tus propios refrescos mucho más ricos y saludables.

La alternativa al café con hielo

Café aromatizadoUn café recién hecho al que se le añade alguna especia, sorprende. A un café ligero se le pueden añadir vainas de vainilla y dejar infusionar, también jengibre, comino, hinojo, cilantro o una pizca de canela molida, clavos de olor molidos en la tetera… Cualquier especia debe echarse en caliente, para que se disuelva y después añadir hielos de café o poner la bebida en una bandeja en el frigorífico. Si se añade cacao puro, queda muy bien sin disolver. Incluso puede pedirlo en una cafetería y añadir la especia, yo lo hago siempre con la canela, que suelen tener en todas partes, pero también se puede hacer con la pimienta o el cacao. Un café tipo americano, al que se añaden unas hojas de cardamomo y se deja reposar, es toda una experiencia.

Hay que recordar que un café largo se hace como un café normal pero añadiendo después el agua, porque si ponemos extra de agua en la cafetera se oxidará y estropeará.

Fuente: Bebidas artesanas de Lindy Wildsmith (Blume)