Explorar los límites de lo que los consumidores y usuarios podemos llegar a soportar parece ser el objetivo de algunas empresas multinacionales. Su última ocurrencia son los hoteles en los que estas solo. Vas sólo a la habitación introduciendo un código que te dan cuando reservas la habirtacdión, tú mismo te sirves las bebidas en la hora feliz, y también decides si no quieres que te limpien la habitación: aún no sabemos si hay un kit para que te la limpies sólo. La excusa es que tengas privacidad e independencia, la razón final ahorrarse los costes de personal. Las Cadenas Starwood y Haytt ya han apostado por estas prácticas para sus hoteles e incluso en crear una marca con «el invento». Habrá que preguntarse qué sucederá si alguno de los clientes cae enfermo, si se produce un problema de seguridad: incendios, robos, etc… si se precisa un medicamento, conocer el funcionamiento del aire acondicionado o pedir una toalla extra.
