La cervecera Heineken España abrió hace más de diez años la Escuela de Hostelería Gambrinus, con sedes en Sevilla y Jaén, por las que ya han pasado más de 7.000 alumnos y que llega a Madrid en septiembre, de la mano del chef Pedro Larumbe, quien ha cedido parte de sus instalaciones de sus restaurantes en el Centro Comercial ABC Serrano, La Finca del Valle, Plató, y ahora también en el Paseo de la Castellana.
La Escuela se creó para mejorar el sector hostelero mediante la formación a través de cursos y seminarios dirigidos a camareros, maîtres, cocineros y sumilleres, unos trabajos cada vez más complicados y reconocidos que requieren profesionales comprometidos y cualificados.
Gambrinus busca difundir la cultura de la cerveza, relacionándola con la alta cocina, una bebida que se puede utilizar como ingrediente en numerosos platos y que también sirve como maridaje de otros. Además, está completamente integrada en la dieta española, ya se celebran multitud de catas de cerveza y tiene propiedades saludables, como de hidratación en las personas mayores.
Los cursos están dirigidos al público en general y a profesionales del sector, quienes pueden apuntarse a algunos como Corte de jamón, Pastelería, Cocina con aceite, Cocina italiana, etc. En estos cursos se aprenden todas las ramas del sector, como servicio de barra y comedor, bebidas, técnica de cocina y gastronomía, seguridad, dietética y nutrición o atención al cliente, y se completan con un periodo de prácticas de tres meses de duración que los alumnos pueden realizar en restaurantes de toda España.
Al acto de presentación, celebrado en el nuevo restaurante de Pedro Larumbe en la Castellana, acudieron Richard Weissend, presidente ejecutivo de la cervecera, Jesús Barrio, director de la Escuela y el chef, quienes estuvieron acompañados por grandes profesionales de la gastronomía como Alberto Chicote o Mario Sandoval.