La autora de La Felicidad después del orden recomienda que la cocina sea el último lugar de la casa que se ordene, ya que posiblemente sea el más dificil y, además, nos recuerda que tendremos que tener las ideas muy claras para hacerlo.
La cocina más ordenada es aquella que se puede limpiar bien, y Marie Kondo pone el ejemplo de las cocinas de los restaurantes cuando se limpian: ¿qué hay en las encimeras? Nada, por lo tanto, cada cosa está en su sitio…
¿Como tener la cocina ordenada?
- Lo primero es clasificar todo lo que hay en la cocina en tres categorías: cubertería y vajilla, utensilios y alimentos.
- Después, debemos sacar todos los objetos y colocarlos en el suelo, o donde podamos, juntos por estas categorias, tirando a la basura, en todos los casos, los elementos rotos, deteriorados y caducados: así haremos la primera ordenación.
- No se harán distinciones entre vajillas de lujo y las ordinarias, ni se retirarán las copas más elegantes: todo se usará a la vez. porque si no justamente los objetos que más nos gustan y nos dan felicidad acabaremos por no usarlos nunca.
- El sistema básico de almacenamiento consiste en dividir el armario en una zona para piezas de beber, como los vasos, y otra para las de comer, como los platos, y apilarlas por tamaños, colocando delante siempre los que más usemos.
- Los cubiertos se pueden colocar el posición vertical, en tubos, u horizontal en una caja con compartimentos, lo mejor es en el cajón de la cocina con una bandeja que ya venden para ese cometido. El resto de los utensilios se colocarán en cajones por tipo de utilización: las espumaderas con las espumaderas, las tijeras juntas, etc. Si tenemos mucho de cada tipo podemos atarlos con una goma, por ejemplo, palillos para los sushis o cucharas.
- Los utensilios como cucharones o similares, que se cuelguen de la pared, no deben estar cerca del fuego para que no salpique y se manchen o incluso se quemen.
- Los recipientes se almacenan apilados, tanto cazuelas como sartenes, poniendo las tapas en un contenedor que permita colocarlas en vertical.
- Los aparatos de cocina deben ir en un armario, dejando más a mano los que más se usan, por ejemplo la tostadora o la batidora, y más en el fondo el resto.
- Si no se van a utilizar los recipientes desechables inmediatamente, es mejor no guardarlos. ¿De verdad vas a usar una cucharita de plástico?
- Las bolsas de plástico del super se pueden guardar dos o tres y el resto tirarlas, ya que con el espacio que ocupan no merece amontonarlas guardando polvo. Si son de tela o cartón se pueden guardar unas dentro de otras y dejarlas dentro de un armario.
- Los productos de limpieza se guardarán debajo de la fregadera y nunca se dejarán ni balletas ni estropajos a la vista en la fregadera. Se colocarán en una bandejita o en un contenedor para que no goteen pero siempre debajo dentro del armario.
- Los alimentos se guardan por tipos o categorias (condimentos, legumbres, carbohidratos secos: arroz, pasta, alimentos enlatados, para cocer, dulces, pan y suplementos dietéticos…) dejando los de caducidad más cercana delante.
- Las bebidas en botella irán en los estantes de abajo, y las latas también.
- Los alimentos de mayor uso se colocan a la vista de los ojos, ni muy altos ni muy bajos, y siempre etiquetados para saber lo que son y, a ser posible, con sus fechas de caducidad.
- Los alimentos perecederos se colocarán en la nevera. El 30% de la misma debe estar vacía para que haya orden y sepamos dónde estan las cosas. Se almacenarán por categorias: el pescado junto, la carne junta; las sobras, bien tapadas también juntas; frutas y verduras en contenedores: la mayoría de los frigorificos tienen sus especificaciones de dónde deben ir cada cosa.
¡No lo olvides!
- No almacenes bajo el fregadero nada que pueda estar afectado por la humedad.
- La clave del almacenamiento en la cocina es la utilización de la altura de los espacios.
- Si hay que almacenar muchas cosas, será mejor separarlas por uso frecuente y poco uso. Las cosas de «poco uso» se almacenaran en los estantes superiores.
- Podemos utilizar pequeñas cajitas o contenedores dentro de los armarios o cajones separan unos objetos de otros, lo que nos ayudará a tener más orden, como por ejemplo los tapones de botella, los abridores o los medidores.
- …Y tras la limpieza llega la decoración. Puedes poner cuadros en las paredes, cortinas sobre la zona de desperdicios, vajillas a la vista tras el cristal, pequeños mosaicos pegados…
Fuente: Libro La Felicidad después del orden (Marie Kondo) Editorial Aguilar.