Aunque estamos en pleno verano, algunas familias todavía no tienen claro qué hacer o dónde ir de vacaciones, en medio de una vorágine de destinos y ofertas.
En estos tiempos, debido a la actual situación económica, así como al auge de la cultura del compartir, cada vez son más personas las que se deciden por intercambiar su casa con gente de otras ciudades o países, descubriendo así una nueva manera de viajar.
El intercambio de casas es una manera diferente de viajar donde personas de distintas zonas geográficas acuerdan intercambiar sus casas para viajar y descubrir nuevos lugares, y donde el intercambio puede ser simultáneo o no. Las ventajas son claras: se dispone de alojamiento gratuito, mayor espacio y comodidad que en un hotel, y la oportunidad de descubrir el lugar de destino como un local y no como un turista.
Knok es una comunidad online que permite encontrar gente de todo el mundo con la que intercambiar casa (piso, apartamento, etc.) en sus próximas vacaciones. Nacida en 2011, cuenta ya con miembros en más de 100 países, desde un apartamento junto a Central Park en Nueva York hasta una casa de campo en la Toscana.
Según Juanjo Rodríguez, fundador de Knok, «lo primero en lo que todo el mundo piensa es en el ahorro económico, pero en realidad son otras las ventajas que hace que la gente se enamore de esta forma de viajar: se dispone de mucho más espacio que una habitación de hotel, algo muy cómodo especialmente para las familias con niños; es genial para vacaciones largas; y además descubres restaurantes, tiendas y otros sitios locales con los consejos de tu partner de intercambio, la mejor guía posible de cualquier ciudad«.
El año pasado se realizaron más de 250.000 intercambios de casas nivel mundial, y todo parece indicar que este año se superará esta cifra con creces. De hecho, Antonio, experto viajero con más de 8 intercambios a sus espaldas, comenta «A mi mujer y a mí nos encanta viajar y hemos hecho varios viajes alrededor del mundo en los últimos 10 años. Un amigo nos habló del intercambio de casas y pensamos que podría ser una manera muy interesante de viajar (y más ahora que tenemos un hijo), así que buscamos una persona para intercambiar… ¡y nos aventuramos a probarlo! El primer intercambio, que fue de dos semanas en Nueva York, nos permitió a descubrir la ciudad desde otro punto de vista, y desde entonces, ¡nos encanta intercambiar! Ya hemos intercambiado con San Francisco, París, Burdeos, Bretaña, Toscana, Estambul, Berlín… y tenemos ya cerrado para este verano un intercambio en Córcega».
El fundador de Knok señala que «venimos de una cultura donde poseer forma parte de nuestro ADN, pero los tiempos están cambiando, y cada vez más las personas prefieren vivir experiencias y no tanto poseer objetos. Knok refuerza esta tendencia y, además, somos conscientes que en momentos económicos difíciles como el actual, el intercambio de casas es una alternativa de viaje muy interesante. El 50% del presupuesto de un viaje se dedica a gastos de alojamiento y sin embargo nuestra casa se queda vacía cuando nos vamos de vacaciones. Tiene todo el sentido del mundo intercambiar con alguien en el lugar de destino. Todas las personas que conozco que lo han probado… ¡se enganchan y repiten!«.
¿Y tú, estás preparado para intercambiar tu casa este verano?