Madrid ha acogido por primera vez la reunión de la asociación de reposteros Relais Desserts, la única asociación profesional internacional que integra a los nombres más importantes de la pastelería, y cuyos miembros han sorteado las dificultades aéreas de estos días para visitar Madrid ayer lunes, 19 de abril, y llevar a término la reunión española de sus famosos Rencontres Internationales. Este encuentro anual, que se celebra un año en algún punto de Francia y el siguiente en otro país de cualquier parte del mundo, forma parte de las actividades sociales de la asociación y sirve, como ha comentado su presidente, Frédéric Cassel, «para acercar la alta pastelería a la ciudad de acogida: en este caso la bella Madrid».
De la mano de la cadena de pastelerías más importante de la capital, y capitaneados por el maestro repostero Miguel Moreno, cerca de 50 de los 85 miembros de Relais Desserts han visitado la fábrica de Pastelería Mallorca en Móstoles y han presentado en el palco de honor del estadio Santiago Bernabéu sus mejores postres, un conjunto de obras de arte que marcan, como ha comentado Cassel, «el referente mundial del sector». Bombones de macarrón procedentes de los maestros parisinos, blancos y negros del pastelero suizo Pascal Lac o cajas de bombones pequeños de la misma Pastelería Mallorca han sido algunos de los postres expuestos, cada uno con sello propio, y todos ellos adalid de una cultura gourmet exquisita que sorprende y entusiasma por igual a vista, olfato y gusto.
Antes de llegar al Bernabéu, los pasteleros se han hecho la fotografía representativa de la reunión en la Puerta de Alcalá, donde han posado vestidos con su indumentaria blanca correspondiente en una imagen para la historia, la de la élite repostera mundial en la ciudad que quiere abanderar su eclosión.
El futuro: la Pastelería razonada
El encuentro madrileño de la asociación ha servido también para evidenciar la tendencia actual del sector. Como han venido a señalar todos sus componentes, «nos encaminamos hacia una pastelería razonada, una pastelería que reduce las materias grasas manteniendo el nivel gustativo de la pieza». Así, la tentación seguirá, pero ahora, tal y como ha apuntado Cassel, «el placer será más sano».
Además de aprender y acordar el estilo futuro de la alta repostería, el encuentro madrileño de la asociación ha servido a sus socios para conocerse mejor y aprender mutuamente, compartir recetas, trucos y sabiduría, conocimientos que siguen enfatizando este martes en Alicante, donde Jacob y Paco Torreblanca toman el relevo en la bienvenida.