Las tradicionales rosquillas de San Isidro vuelven a Madrid cada año, por ello durante el mes de Mayo será posible disfrutar de las rosquillas en muchos establecimientos pasteleros de la capital. El maestro pastelero de Nunos Pastelería (Narvaez nº 63, Madrid) , José Fernández, presenta un festival de tradición e imaginación con toda la variedad: las de San Isidro, listas y tontas. Su elaboración es siempre con Aceite de Oliva virgen extra de Belmonte del Tajo (Madrid) y, en el caso de las tontas, con Anís de Chinchón.
Esta tradición castiza por excelencia viene acompañada de novedades como las perfumadas, con las primeras Fresas de Aranjuez de la temporada; intensas, con Naranja y Chocolate Alto El Sol de Perú; o aromáticas, con Anís de Chinchón y Café Puro de Colombia.
Presentes en Madrid desde el siglo XV son las Rosquillas de Santa Clara, receta que debemos a las monjas Clarisas, elaboradas tradicionalmente con Anís, Vainilla y su costrada merengada, y que tienen nuevas versiones con merengada de Fresas de Aranjuez o Chocolate de Venezuela.
Las Rosquillas Francesas de tiempos de la reina Bárbara de Braganza, con su picado tradicional de Almendras, Vainilla Bourbon y Canela de Ceylán, también tienen una nueva versión con Piñones y Tomillos del Monte de Abantos.
Las famosas Rosquillas de Alcalá, de hojaldre bañadas en yema, se pueden encontrar con Albaricoque con Chocolate Oropuche de la Isla Trinidad; de Melocotón de Viña; de Gianduja de Coco; de Fresas con Menta o de Praliné de Avellanas del Piamonte.
Por último tenemos las Rosquillas los Galos, que fueron creadas para conmemorar el Alzamiento del Dos de Mayo en Madrid y que se elabora con masa choux frita, corazón de crema pastelera y cobertura fondant de distintos sabores. En esta pastelería se pueden encontrar con el Chocolate de Madagascar, Chocolate Blanco, Fresa, Regaliz Negro, Limón o Mandarina.
Los precios varian en Nunos Pastelería entre 32 y 36 euros, según el tipo de rosquilla.
