En el madrileño restaurante Kilómetros de Pizza, en la Avenida de Brasil, 6, se ha celebrado un curioso encuentro entre el vino y las pizzas. No se trata de un combate, sino de una armonía, casi perfecta y muy sorprendente. De un lado Jesús Marquina, propietario de la Pizzería Marquinetti en Tomelloso, 4 veces campeón del mundo de pizzas y copropietario del local madrileño, de otro Joaquín Parra, Director de Comunicación de las manchegas Bodegas Verum y premiado en la última edición de nuestros Premios CON por su proyecto de enoturismo inverso. Ambos nos proponen un menú degustación a base de 6 pizzas maridadas con los vinos de la bodega, y con cata comentada. El precio: 25 euros y la sala, prácticamente al completo
- Pizza de pera y gorgonzola, con masa fermentada durante 72 horas, delicado sabor con toques dulces, la base jugosa, se acompaña con Verum Blanco Airén, un tipo de uva única de la zona y exclusiva para blancos de la bodega.
- La Reina del otoño: con masa con 80 horas de fermentación, lleva exquisita mortadela italiana de Negrini, trufa, boletus y crema de calabaza: puro sabor a otoño, a bosque, a hojarasca, que combina extraordinariamente con otro blanco Verum Coupage más intenso y aromático.
- Pizza Nápoles, realizada con masa fermentada durante 48 horas, y elaborada con tomate San Manziano del Vesubio y anchoas de Santoña, la base muy crujiente, en exquisita combinación con la acidez del tomate y la salinidad de la anchoa. En este caso el afortunado acompañante es un Verum Rosado muy joven y alegre.
- Pizza de Foie: realizada con masa fermentada durante 60 horas, lleva un excelente foie, además de higos frescos y granada: una delicia gourmet que se empareja con un Verum Tinto roble.
- Pizza La Venta, con masa fermentada durante 72 horas lleva tomate, huevos de codorniz, tocino y chorizo. Destaca por su sabor y el equilibrio entre sus ingredientes que en ningún momento resultan excesivos. Armoniza perfectamente con Verum Tinto Crianza.
Finalmente en los postres, una pizza dulce: Dulce Pecado con masa fermentada durante 74 horas, tiene una extensa capa de Nutella por encima además de trozos de fresa y hojas de menta. Refrescante y sabrosa, recordando a las meriendas de la infancia, se acompaña con fortuna con Verum Gran Cueva, un espumoso elegante que refresca y además complementa muy bien el dulzor de la pizza.