El estudio arroja que los precios del Menú del Día han subido, al contrario que su calidad

Menús del día, comer bien también es posible

Eva Celada01/11/2008

El 26% de los españoles come fuera de casa, la mitad de lo que gastamos en alimentación lo hacemos precisamente fuera del hogar y las consecuencias de este nuevo hábito alimenticio son varias: por una parte el descontrol alimenticio y la tendencia al sobrepeso, y por otra la pérdida de costumbre de cocinar en los hogares, lo que lleva en muchos casos a una perdida de socialización en el hogar.

Según un reciente estudio realizado por la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios), más de tres tercios de los restaurantes no ofrecen menús variados, a pesar de que la Agencia Española de Seguridad Alimentaria, la Fundación para la Dieta Mediterránea y la empresa Accor Services han creado el distintivo de calidad «Gustino», al que pueden adscribirse los restaurantes que incluyan en sus menús platos y formas de preparación sanas. Cuando vayamos a un restaurante que tenga ese distintivo, sabremos que ofrecen fruta fresca, que disponen de pan integral, menús con medias raciones o posibilidad de tomar un sólo plato a un precio más reducido, que ofrecerán directamente agua y que, entre otras curiosidades, no pondrán nunca salero sobre la mesa salvo que lo pida el cliente.

Los peor parados en los menús del día suelen ser las frutas, verduras y pescados. Huevos y legumbres también escasean, como sucede en Valencia. Sin embargo, Madrid es la ciudad española en la que más se ofrecen verduras y pescados; mientras que en Bilbao tiene un mayor número de menús equilibrados. La información de platos, guarniciones y cantidades la dan mejor los restaurantes de Barcelona, siendo Sevilla la ciudad cuyos restaurantes ofrecen menos información, y a su vez es donde más disparidad de precios existe en el menú de 5,9€ a 20€.

Sin embargo, en la elección de los platos, así como del establecimiento al que vayamos cada día, está el secreto de que comamos bien. En primer lugar intentaremos tomar pocas frituras: los pescados o carnes a la plancha, al horno o al vapor. Evitar las salsas complejas y los dulces; y de postre, siempre fruta o lácteos. Por 10 euros, que viene a ser el precio medio de un menú del día en España, es muy difícil preparar cocina casera, la razón es muy sencilla: la cocina casera tiene como base fundamental «el tiempo», que se traduce en Mano de Obra, que un restaurante de estas características no suele poder tener, por ello la mayoría de las veces los platos que nos proponen serán pre-cocinados, bien traídos de fábrica o bien hechos y congelados para ser utilizados el día del consumo. Olvidémonos de las patatas recien cortadas, del tomate natural, de los escalopes recién hechos. Igual suerte corren muchas verduras y sopas de concentrados. Aunque parezca increíble, resulta más económico una macedonia en almíbar que fruta fresca, por esa razón pocos restaurantes ponen fruta… ¿y entonces qué hacemos?

CONSEJOS PARA COMER BIEN FUERA DE CASA:

  • Ir a restaurantes que tengan menú variado y que parezcan limpios.
  • Elegir los platos teniendo en cuenta lo que vamos a cenar para no repetirnos.
  • Procurar tomar medias raciones o que uno de los platos sea ensalada.
  • Evitar los guisos de carne en los restaurantes de menú del día.
  • Las legumbres tomarlas siempre con verduras, sin chorizo ni tocino.
  • Evitar las cremas en las que con frecuencia se echan alimentos de reciclaje.
  • Si tomamos pan, que éste sea integral.
  • Beber siempre agua.
  • Pedir platos con elaboraciones sencillas, sin salsas, ni guarniciones poco reconocibles, de modo que el alimento principal quede lo más limpio posible.
  • Al vapor, horno o plancha son las mejores formas de preparación.
  • No pedir frituras en el restaurante del menú del día (el aceite con que se fríen suele estar sobre utilizado)
  • No salar nunca los platos antes de haberlos probados.
  • Beber siempre agua: el vino no será de gran calidad.
  • De postre, un lácteo o una pieza de fruta es la mejor opción.
  • Un par de veces a la semana se puede sustituir el almuerzo del menú del día por un bocadillo, por ejemplo de jamón con tomate natural en rodajas, un poquito de aceite y queso; o también de atún natural con pimientos, o tortilla… en tal caso el postre que sea fruta.
  • EN GENERAL: comer poca cantidad y con la máxima calidad posible.
Foto: juanpol