Nájera, bocados gourmet y excelentes vinos para los amantes del buen vivir

Un restaurante con solera que abrió sus puertas en 1959, para conquistar los paladares más sibaritas, con una propuesta gastronómica de gran calidad

Ana S. Diéguez14/05/2021

Todo un clásico. Un restaurante de toda la vida dónde comer francamente bien. Un grato descubrimiento gracias a la recomendación de Pepe Caldas, el simpático dueño de Taberna Puerto Lagasca y de Taberna Los Gallos. Un canario carismático y encantador que a día de hoy sigue estando eternamente agradecido a su gran amigo «Monchete», Ramón Hidalgo, dueño del restaurante Nájera, por todos los consejos y contactos que le proporcionó, cuando se aventuró a lanzarse de lleno en el ámbito de la hostelería.

El primer restaurante Nájera abrió sus puertas en 1959 en la madrileña calle de Guzmán el Bueno, con el objetivo de ofrecer siempre una carta elaborada con las mejores materias primas. Honestidad, tradición y calidad podrían ser el sello de esta casa de comidas, que ahora también ha hecho su incursión en el exclusivo barrio de Salamanca, concretamente en el número 116 de la calle de Claudio Coello.

Marina, la madre de «Monchete» fue quién animó a su marido, Florencio a quedarse con el primer local. Una pequeña taberna en Guzmán el Bueno que siempre está hasta arriba. El secreto, no escatiman en ofrecernos siempre los mejores productos a muy buen precio.

Un negocio familiar que hace gala de un ambiente agradable y un servicio sumamente atento que se desvive para que nos sintamos como en casa. Recetas caseras y tradicionales, a las que añaden un toque de modernidad. Propuestas que fusionan los sabores más clásicos con matices innovadores para sorprender y conquistar a los paladares más exigentes. Elaboraciones sencillas que buscan conferir un protagonismo indiscutible al producto y que no requieren florituras ni aderezos innecesarios. Una taberna castiza como las de antaño, que conserva el auténtico ambiente de barrio, con ese encanto tan característico que cada vez resulta más difícil encontrar.

Los míticos huevos rellenos de Nájera

En esta ocasión, empezamos la ruta en el restaurante Nájera de Guzmán el Bueno, dónde el propio «Monchete» nos cautivó con sus míticos huevos rellenos, una deliciosa ensaladilla rusa, unos tomates raf, que compra a quince euros el kilo y que saben a tomate de verdad, y unas formidables gambas a la plancha que son un verdadero espectáculo.

No pudimos resistirnos a la tentación de visitar el local de Claudio Coello. Un concepto totalmente distinto en cuanto a decoración se refiere. Elegante. Coqueto. Amplio. Predominan las tonalidades azules y la luz natural que se cuela por la amplia cristalera de la fachada. Un precioso restaurante que conserva la esencia de sus orígenes.

Nájera, Claudio Coello

En Nájera de Claudio Coello, probamos una sorprendente propuesta que nos enamoró. Las alcachofas de Jerusalén con huevo y trufa. Un plato que engancha y seguro que nos obliga a volver muy pronto. También saboreamos un formidable puchero, y un divertido bocadillo al que bautizan «Monchito». Elaborado con solomillo, tomate raf, mayonesa casera y un toque de mostaza, que sin duda merece la pena probar.

El Bocadillo de solomillo "Monchito"

Desgraciadamente, tras la ruta de Nájera al completo, nos resultó completamente imposible probar la tarta de queso casera que Sol prepara con sumo cariño, por lo que será necesario volver…

Nájera nos sorprende con el genuino sabor de esos platos tradicionales que irremediablemente evocan recuerdos y nos sacan una sonrisa. Un local especial con espíritu tabernero dónde, no solo disfrutar de la buena gastronomía, sino también de buenos momentos… Esos que nunca se olvidan.

Restaurante Nájera

Dirección : Calle de Claudio Coello, 116, 28006 Madrid

Teléfono: 91.543.10.82

Precio Medio: 30€