Open Restaurants Jerusalem

Cinco días repletos de buena comida y actividades relacionadas con la rica y diversa gastronomía jerosolimitana, como ponencias, exposiciones, actividades para niños, chefs explicando sus "secretos" y mucho más.

Joaquín del Palacio14/12/2017

Cóctel a mediasJerusalén es un destino al que han acudido multitud de personas de todo el mundo. Unas simplemente de visita y otras se han quedado a vivir. En 1860 la ciudad era la que cabía dentro de las murallas, pero en poco más de siglo y medio se ha convertido en una gran ciudad moderna con muchos atractivos, aparte de los históricos, que están casi todos intramuros.

Por otro lado, Israel es un referente en tecnología aplicada a la gastronomía, desde el campo hasta la cocina. El aprovechamiento del agua, así como los cultivos en territorios desérticos son algunos desafíos que solucionan positivamente, pero incluso usan la tecnología para serigrafiar alimentos, como panes o cafés. Estas características y la creatividad mediterránea hacen que nos encontremos en un destino gastronómico de primer orden.

Adorable diversidad

Mercado de JerusalénJerusalén se encuentra entre las ciudades más antiguas del mundo que aún siguen habitadas y que poseen una historia muy intensa e interesante. En su entorno habitan 1.700.000 personas, muchos de los cuales provienen de decenas y decenas de nacionalidades diferentes.

Esa diversidad hace que sus restaurantes sean italianos, argentinos, asiáticos o de cualquier lugar del mundo, ya que sus dueños proceden de otro país y han traído consigo las tradiciones culinarias y las recetas de su lugar de origen.

El chef israelí Michael Katz dice que en 20 años la comida de los restaurantes, que era de baja calidad y casi todos estaban llevados por chinos y rumanos, ha ido poco a poco cambiando, diversificándose y mejorando. También se han abierto más restaurantes y hoy es fácil encontrar multitud de tipos diferentes de cocina y de calidad.

En este evento se ha notado la fuerza de la nueva cocina judía, que cuenta con unas características propias que la diferencian y le aportan valor:

  • Muchos judíos traen de Europa otros sabores y nuevas técnicas de cocina.
  • La influencia de sus vecinos árabes les aporta una personalidad única.
  • Los cocineros israelíes son cada vez más y están cada día mejor preparados a nivel internacional.

Una iniciativa admirable

Exposición fotográficaA principios del siglo XXI, unos cocineros de las tres religiones más importantes de Jerusalén (Islamismo, Judaísmo y Cristianismo) se unieron para cocinar sin ideas políticas, dejando sus creencias en silencio y trabajando por hacer que la paz llegue a través de la mesa, a través de la comida. Su objetivo principal era, es y será unir a la gente alrededor de una mesa, sin importar su color, su religión o su política… ¡Y lo consiguen! Es la iniciativa más sensacional e interesante que se está llevando a cabo ahora en la gastronomía jerosolimitana.

Chefs for Peace o, lo que es lo mismo, Cocineros por la Paz nos trasmiten su mensaje: «entienden la comida, su preparación, intercambio y disfrute, como un medio poderoso para crear un vínculo con los demás y revelar lo que las tres religiones valoran: comida, familia y amigos«. Esperemos que la comida y la mesa traigan la paz a los pueblos de la Tierra.

Actividades para todos

Comida con mensajeDurante los cinco días que dura Open Restaurants Jerusalem se producen todo tipo de eventos relacionados con la gastronomía: ponencias, rutas, actividades para niños, restaurantes abiertos con sus cocineros más cerca del público, etcétera. Son actividades muy interesantes en varios aspectos, porque unas nos informan, nos divierten y otras nos acercan la gastronomía y los cocineros.

Del 14 al 18 de noviembre la diversidad gastronómica de Jerusalén se acerca al público, ofreciendo mayor conexión entre chefs y clientes y facilitando más información sobre tecnología, platos tradicionales o productos gastronómicos, pero también yendo más allá y buscando la interpretación artística, en una vanguardista y atractiva exposición fotográfica en la que se busca un nuevo enfoque de los objetivos sobre el alimento.

Pon tu foto en el caféEntre todas las actividades destaca una muy entretenida y sensacional que consiste en hacer una fiesta en un tranvía con una bolsita de picnic que contiene un cóctel, unos aperitivos y una botella de agua, además de un sombrero de fiesta y un collar.

Es una actividad muy amena que, incluso, llama mucho la atención del público en general al pasear por la calle y ver que un tranvía pasa con un grupo de música tocando en directo y  con sus pasajeros bailando con sombreros de colores y disfrutando con alegría, entre la decoración festiva del vagón.

Esperemos que el Open Restaurants de 2018 nos siga enseñando, divirtiendo y sorprendiendo gratamente, porque esta mina de la gastronomía tiene mucho que ofrecer.