Existen una enorme cantidad de falsas informaciones sobre lo que deben comer las personas con diabetes. Es fundamental saber exactamente cual es la información correcta para tener una alimentación sana y poder reconocer los diferentes alimentos. Para ello, hablamos con una auténtica experta en la materia, la doctora Noemí González Pérez de Villar Endocrinólogo del Hospital Universitario La Paz (Madrid).
La “falsa dieta del diabético”

Uno de los errores más frecuentemente cometidos por pacientes y profesionales sanitarios en general, es considerar que la persona con diabetes debe realizar una dieta “de diabetes”, es decir, una dieta especial. Y eso es absolutamente falso.
Las personas con diabetes deben comer una dieta saludable, igual que el resto de las personas que no la tienen. La diferencia radica en que deben aprender a reconocer los carbohidratos de la dieta, su calidad y carga glucémica, para poder predecir el comportamiento de su glucosa tras ingerirlos y ajustar su tratamiento (especialmente en caso de insulina).
Por lo tanto, la alimentación para las personas con diabetes consiste en una dieta saludable, baja en grasas saturadas y aceites trans, rica en fibra y evitando los carbohidratos de absorción rápida.
Alimentos prohibidos para la diabetes

De lo anterior se deduce que no hay alimentos prohibidos en diabetes. Hay alimentos no saludables que no deben comerse de forma frecuente, como en cualquier otra persona (por ejemplo, comida basura, dulces, bollería industrial, tartas, etc), porque, además de no ser saludables, producen un impacto negativo en el control de la glucosa.
El resto de los alimentos, cocinados de forma sencilla, y conociendo las raciones, pueden tomarse, adecuando el tratamiento si es preciso.
Consejos para personas con diabetes en sus comidas o cenas fuera de casa

El consejo es para todos: elegir platos que combinan verduras, proteínas bajas en grasas y carbohidratos de bajo índice glucémico (pastas y arroces integrales, legumbres, semillas…). Que estén cocinados a la plancha, papillote o al horno, para reducir las grasas no saludables.
Y si se opta por un plato menos saludable, asumir que es posible que tenga repercusión negativa en su glucosa en ese momento, pero disfrutarlo, como una excepción a lo habitual… como cualquier persona sin diabetes que quiera cuidarse.
Llegan las Navidades: riesgos y cuidados

En Navidad se suelen comer platos más contundentes, con más grasas, y dulces típicos de las fiestas. Ello tiene consecuencias sobre el peso (favorece la ganancia ponderal), sobre el colesterol y la tensión (suelen tener más sal), y sobre la glucosa, porque dificulta el control adecuado de ésta. Por ello, se debe procurar reducir las comidas “especiales” a los días concretos de Navidad. Nada de comer un polvorón a diario, o roscón para desayunar desde mitad de diciembre.
La clave está en la excepción: reducir las transgresiones a los días especiales. Y desde luego, ser muy estrictos con el tratamiento pautado por su médico. Sin olvidar la actividad física que, en fiestas, se suele tener más tiempo para realizarla.
Los niños y la diabetes: ¿cómo explicarles la enfermedad y trucos para que tomen conciencia?

Los niños aprenden muy rápido si se les educa desde pequeños. Aprenden a identificar los carbohidratos “buenos” y “menos buenos”. Saber que pueden tomar, como el resto de los niños, alguna vez “chuches” o tarta, les hace sentirse iguales, y eso es fundamental. Por supuesto que no es fácil e incidimos en que la familia al completo debe dar ejemplo aprendiendo a comer saludable, nada de hacer comidas diferentes.
Realizar un adecuado control del nivel de glucosa

Para que una persona con diabetes no desarrolle complicaciones se debe esmerar en el control de la glucosa. Para ello es necesario conocer las cifras que tenemos en cada momento y sobre todo en el momento de ponerse la insulina. Actualmente, podemos medirnos el nivel de glucosa en el dedo (glucosa capilar) o bien, monitorizarla a través de un sensor continuo de glucosa. Ello nos permitirá, en el caso de la insulina, decidir la dosis que pincharse, teniendo en cuenta la ingesta, la actividad física y otros factores.
Hoy día, además, tenemos sistemas de infusión continua de insulina conectados con sensores, que en determinados pacientes, permite un manejo muy individualizado de la insulina mejorando mucho su calidad de vida.
¿Sólo es importante la glucosa en las personas con diabetes?

No, tan importante como la glucosa, es tener un adecuado nivel de colesterol, no fumar, mantener un peso saludable o controlar la tensión arterial. Las complicaciones de la diabetes se producen por la combinación de todas ellas, y por ello, los médicos somos muy insistentes en tener a raya todos estos factores. Y recordad, para evitar la obesidad, el colesterol y la tensión, la dieta que deben realizar es la misma que para la diabetes: una dieta saludable.
Por tanto, comiendo bien, buscamos controlar los factores más importantes que favorecen la aparición de infartos de corazón y otras complicaciones serias. Sin olvidar, por supuesto, la actividad física y tomarse bien toda la medicación prescrita.