L’Eixample en Barcelona no sólo destaca por su característica arquitectura, sino por sus maravillosos lugares de ocio y gastronomía que alberga. En el corazón de este barrio nos encontramos con la calle Enrique Granados, pianista y compositor, quien durante el Modernismo creó la primera escuela de piano en la ciudad.
No es extraño por ello que esta calle semi-peatonal sea uno de los lugares de mayor ambiente. Será fácil reconocerla por su espíritu animado: galerías de arte, las mejores tiendas de decoración, sus innumerables terrazas y su oferta culinaria hacen de ella uno de los enclaves más chic del momento.

Diversión asegurada y cócteles que se traducen en puro arte
En medio de esta atmósfera nos encontramos con el restaurante Jacqueline. Los ingredientes principales de este restaurante son: su cuidada y deslumbrante decoración, música en directo de todos los estilos (desde Flamenco, R&B, jazz y pop), coctelería y bar. Resaltando especialmente estos dos últimos, ya que forman parte del ADN del Modernismo, momento en el que nacieron en Barcelona las primeras coctelerías.
Nada más atravesar su impresionante puerta, la sensación de teletransporte en el tiempo es inmediata. Sus tapizadas paredes, lámparas vintage, alfombras y asientos aterciopelados nos recuerdan a la estética de la época, queriendo hacer aquí mención a los aseos y su decoración sublime. Y es que Jacqueline no deja un detalle al azar, hasta los chalecos del personal van a juego con los estampados del interior.
Este espacio de tres plantas tiene opciones para todo tipo de caprichos: desde una mesa en la que sentarse y disfrutar de una agradable cena con música en directo hasta una barra de omakase en la que deleitarse con un sushi de calidad y un exquisito champagne. Y, para los más animados, un club nocturno que abre a las doce y media de la noche con música electrónica (tan popular en los últimos años en Barcelona).

En cuanto a su oferta gastronómica, este restaurante se distingue por su cocina mediterránea fusión y su impecable presentación. Comenzamos con una deliciosa combinación de croquetas de cecina sobre cremoso de foie y puré de manzana asada. Continuamos con la causa limeña, un plato de origen peruano que consiste en una base de puré de patata y en este caso combinado con taquitos de pulpo y finas hierbas.
No puedes dejar de probar la espalda de cordero con puré de patata trufado y salsa de asado acompañado de un buen vino, una auténtica exquisitez.
En definitiva, Jacqueline es un lugar que no te deja indiferente, perfecto tanto si buscas una velada romántica, una divertida cena de amigos o hasta una buena fiesta en su “Dinner Club”.
- Restaurante Jacqueline
- Dirección: Enric Granados 66. Barcelona
- Teléfono: 682 260 961