RITMO, maravillosas puestas de sol y deliciosos bocados en Formentera

Playas paradisiacas, inolvidables puestas de sol y buena gastronomía convierten a Formentera en un destino ideal para desconectar y disfrutar. Una isla con un encanto especial, que nos seduce con aguas cristalinas, arenas blancas y maravillosos paisajes. Un paraíso en territorio nacional que nada tiene que envidiar al lejano Caribe.

En RITMO, han querido aprovechar todo el encanto de su exclusiva ubicación y ensalzar la esencia de la isla. Un edificio de dos plantas ubicado en el centro de Sant Ferrán de Ses Roques, que tras su reforma integral hace gala de un estudiado interiorismo, dónde cobran protagonismo los materiales mediterráneos como la madera, el barro, el mimbre, el yute y unos maravillosos azulejos de los colores más característicos de las islas Baleares. Tres ambientes que buscan conectar con el estilo arquitectónico de Formentera y en los que los detalles nos embriagan con el espíritu de la isla.  Una encantadora terraza nos recibe en su planta superior con una maravillosa pérgola realizada con madera de castaño y eucalipto para tamizar los rayos de sol. Desde ahí, podemos disfrutar de unas espectaculares vistas que nos regalan estampas de inolvidables puestas de sol.

Al frente de RITMO, el imparable Álvaro Reinoso, que tras el éxito de su restaurante Andanada en Manhattan, galardonado con la primera estrella Michelin para la gastronomía española en Nueva York, se ha lanzado con este nuevo proyecto en nuestro país. Un joven riojano con una larga trayectoria profesional que prioriza siempre el servicio para que el cliente se sienta como en casa. Un trato cercano y personalizado, en un coqueto espacio dónde disfrutar de una cuidada propuesta gastronómica basada siempre en los mejores productos. Espectaculares pescados de la isla y maravillosas carnes. Opciones para todos los gustos que desembocan en una selecta carta de postres.

En esta ocasión, comenzamos saboreando un sensacional gazpacho verde acompañado de tartar vegetal y helado de manzana-miso que nos conquistó de inmediato por su originalidad y su frescor. Continuamos con un sabrosísimo gazpachuelo de navajas con vieiras curadas y velo de tocino ibérico que dio paso a un maravilloso carpaccio de langostinos ácidos y picantes.

Unos entrantes ligeros, saludables y absolutamente excepcionales, que nos llevaron a uno de los platos estrella de RITMO. La «bomba» de frito de cordero que nos engancha con una grata explosión de sabor en boca. Para terminar, optamos por compartir dos platos que nos llamaron la atención en carta. Por un lado, los ñoquis de sepia, ibérico y mojo picón. Por otro, los raviolis wonton de rabo de toro al curry tailandés.  Un par de propuestas atrevidas y arriesgadas, pero francamente acertadas que nos tentaron a subir a disfrutar de una distendida copa en la espectacular terraza de RITMO.

RITMO, toda la esencia y la magia de Formentera condensada en un bonito proyecto que nos regala inolvidables imágenes de la isla. Maravillosas puestas de sol fusionadas con deliciosas recetas, que no solo nos conquistan el paladar… sino también los sentidos. Bocados que nos llevan al cielo para hacernos DISFRUTAR.