Traducido directamente del inglés, lo que significa la palabra «storytelling» es: contar una historia. Básicamente, de eso se trata. De vincular al cliente del restaurante a la historia que hay detrás de los platos y alimentos que se sirven. Gracias a esta estrategia conseguimos que comer no sea solo comer; sino que detrás de cada plato haya un mensaje con el que pueda identificarse el comensal.
Storytelling de restaurante
Este plan de marketing aplicado a la gastronomía se convierte en locales cuya identidad y valores están muy claros. El plan consiste en contar de forma transparente el trabajo, historia y anécdotas que hay más allá de los fogones. Conseguir transmitir que uno de los platos en concreto está basado en la receta tradicional de la familia; para así dejar en quien lo prueba la sensación de que detrás de ese manjar hay tradición, valor familiar y calidad.

Es decir, pasar la línea de lo objetivo hacia el mundo emocional; conseguir tocar la fibra sensible. A mi se me ocurre un ejemplo muy claro con los productos de mi tierra. Un restaurante que incluya en la carta una buena ensalada de cardo de navarra siguiendo la receta tradicional navideña de la abuela… me gana el corazón. O por ejemplo, conseguir que el restaurante que gestionamos sea el que los vecinos recomienden si un visitante llega en busca de comida típica de la zona.
Alimentos que cuenten historias
Pero no solo se trata de idear una historia detrás de los platos, sino de mostrar todo el proceso productivo. Poner en conocimiento del cliente de qué campo se han obtenido las verduras utilizadas, bajo que sistema de producción se han cultivado (por ejemplo, agricultura ecológica) y cómo han sido cocinados.

Las nuevas tendencias gastronómicas aunadas con el food telling han provocado una explosión de restaurantes que ponen en valor los productos de proximidad y de bajo impacto en la huella de carbono. Incluso algunos cocineros como Diego Gallegos muestran su propio huerto con orgullo. Y estas decisiones llevan un mensaje detrás, muestran a un chef preocupado por el medio ambiente y por la sostenibilidad de su cocina. Por ello, el comensal deseará volver por algo más allá de lo delicioso del plato.