Si nunca has practicado el apiturismo o turismo apícola, en la provincia de Málaga vas a poder conocer todos los secretos de la elaboración de la miel, ponerte el traje de apicultor y aprender a catar las mil y unas mieles que atrapan todos los sabores de la Costa del Sol. Y no sólo los dulces, porque aunque la miel se relaciona siempre con la elaboración de postres y repostería, como los pestiños, torrijas, borrachuelos, las gachas dulces con miel y turrones, las nuevas mieles de sabores tan exóticos como el aguacate son un ingrediente más de la cocina malagueña.
El Museo de la Miel en Colmenar
En todas las comarcas malagueñas existe una importante producción de mieles de abeja, aunque destaca especialmente el caso de Colmenar, que cuenta incluso con un Museo de la Miel.

El turismo apícola nos invita a seguir una entretenida y didáctica senda de la miel en la que se ensalza esta actividad tradicional y artesana, al tiempo que pone el foco en la necesidad de conservar las especies apícolas por todo lo que significa para el medioambiente. Un equipo profesional de monitores nos introduce en el apasionante mundo de la apicultura mostrando los lugares en los que se encuentran ejemplares de plantas muy relacionadas con la actividad apícola, abejas, floración y miel.

En Colmenar (el nombre de la localidad ya lo anuncia) la importancia de la apicultura es tan destacada que incluso forma parte del escudo del ayuntamiento, con la imagen de una colmena y siete abejas volando alrededor. La Casa de la Miel se creó para dar a conocer el entorno, historia de la localidad y explicar el proceso y el paso a paso de cómo se elabora la miel desde la antigüedad hasta el día de hoy, su extracción, conocer sus beneficios y degustar este producto local.
En el museo (que es la sede de la Asociación Malagueña de Apicultores) se puede ver una recreación de una abeja gigante sobre una flor hiperrealista y la sala de la colmena en la que se reproduce el interior de una colmena en grandes dimensiones. Se han recopilado también todas las herramientas que se utilizan para la actividad en un colmenar y en las actividades de los apicultores. Aprenderás datos tan curiosos como este: “En cada colmena viven entre 30.000 y 60.000 abejas, pero una abeja produce únicamente 1/2 cucharada de miel a lo largo de su vida”.

El momento más emocionante es cuando se sale al aire libre, hasta la zona de las colmenas, para ver la actividad de las abejas, protegidos, eso sí, con el traje de apicultor. Allí entenderemos, además, la función medioambiental de la apicultura: gracias a la polinización de las abejas se evita la extinción de un buen número de especies vegetales y contribuye a la biodiversidad: el 75% de nuestra alimentación depende de estos insectos y su extinción desencadenaría un desastre ecológico.

La visita termina en la tienda del Museo, donde se puede comprar cualquiera de los ocho tipos de miel producidas en la provincia, que ampara la Marca de Garantía «Miel de Málaga». También se puede adquirir polen y otros productos de la apicultura, velas de cera de abeja coloreadas, realizadas con láminas y con diferentes moldes, jabón de miel… Además de las mieles de milflores, también se elaboran otras que son monovarietales, como las de aguacate, romero, tomillo, azahar, castaño o del bosque, entre otras.
¿Cómo es la miel de aguacate?
Colmenar se encuentra entre la comarca de la Axarquía y el Parque Natural Montes de Málaga, a unos 60 km de la capital. Las casas solariegas del siglo XIX, las fachadas con hornacinas y los típicos patios andaluces, además de sus iglesias y ermitas (la de la Virgen de la Candelaria, su patrona destaca sobre todas), dibujan el paisaje urbano de Colmenar. Por la variedad y la calidad de sus productos típicos, este pueblo es conocido como la «despensa de la provincia de Málaga», con la miel, el vino y el aceite como sus grandes tesoros gastronómicos.

En Colmenar está La Alquería, una empresa malagueña dedicada a la producción, envasado y comercialización de mieles naturales y de máxima calidad, así como de otros productos derivados de la colmena, como el polen. Selecciona las mejores mieles cosechadas por sus apicultores, desde la milflores, al bosque, pasando por el romero, azahar, eucalipto, tomillo y castaño, pero el producto estrella es la miel de aguacate, de color oscuro y de sabor peculiar e intenso, que proviene de la zona de la Axarquía de Málaga, donde hay gran cantidad de plantaciones.
Sus flores, amarillo-verdosas, son muy atractivas para las abejas, algunos años más que otros dependiendo de la meteorología. Las mieles de aguacate son de color ámbar oscuro, con unos tonos pardo-rojizo-amarillentos, oscura a muy oscura. Tienen un aroma floral tenue y afrutado. El gusto es dulce, con ligeras notas ácidas y notas saladas. Las mieles de aguacate combinan muy bien los platos de bacalao desalado, cordero frito y luego cocido con un majado de hierbas, cerdo al horno, y con los helados y quesos, sobre todo con los de cabra no muy fuerte.

Miel Agustín es una empresa familiar de Teba, en la comarca de Antequera, donde también se elabora miel de aguacate entre otras variedades de mieles de flores y hierbas. Disponen de colmenas trashumantes que van trasladando por diferentes enclaves de la provincia, según la época del año y las floraciones. Podemos ver cómo la hacen y probarla en las visitas guiadas a la fábrica que se completan con la cata de mieles y el taller de vela de cera de abeja.

Productores Hermanos Gallardo es una empresa mielera de Villanueva del Trabuco, en la comarca de Antequera, que se ha rendido a la miel de aguacate, pero sus variedades de romero, tomillo y castaño son también excelentes.
Mieles La Fraguara se dedica a la elaboración de miel en Coín, con alguna variedad muy especial, como las de matalaúva y cilantro. Los niños (y no tan niños) disfrutarán aprendiendo cómo es el mágico mundo de las abejas en la visita a Apícola Milosi, en Alhaurín el Grande.
Y en Bee Garden, en La Pindola, en la sierra de las Nieves, puedes pasar un buen día en la naturaleza porque organizan visitas cuando es tiempo de floración que terminan con una cata de mieles. Bee Garden imparte también cursos de Formación Ambiental y Apícola, y tiene a la venta productos apícolas, castañas, plantas aromáticas, frutas frescas y hortalizas de temporada de su huerto, así que seguro saldrás cargado de ricos recuerdos.