Toledo, esa ciudad especial que yace sobre una colina ubicada en las llanuras castellanomanchegas, conocida popularmente por su valor y aporte histórico, y cuyas calles rezuman historia. Hoy, como toledano, vengo a reivindicar mi capital, mi casa. Toledo es uno de los mejores lugares de España. Y sí, podrías estar pensando que soy muy poco objetivo, que estoy exagerando, pero lo cierto es que esta localidad permite transportarse a otra época, otros tiempos. Por algo es conocida como la ciudad de las tres culturas, llamada así porque durante siglos cristianos, judíos y musulmanes convivieron juntos.
¿Qué se puede ver en Toledo en un día?

- El Alcázar de Toledo: Posiblemente sea el monumento más representativo de esta ciudad. Se trata de una fortaleza medieval, aunque reconstruida en el siglo XVI, que ha albergado decenas de batallas a lo largo de la historia.
- La Puerta Bisagra: Tras esta puerta se para el tiempo. Era una de las entradas que formaron parte de la muralla de Toledo. En la actualidad, nos permite adentrarnos en el casco histórico.
- Mezquita Cristo de la Luz: Muy cerca de la Puerta Bisagra nos encontramos con esta mezquita, construida en el año 999, aunque reconvertida en iglesia años después.
- La Catedral Primada: No puedes marcharte de Toledo sin ver esta espectacular catedral. Es una de las más grandes de España, de estilo gótico y con una torre de más de 92m de altura. Estás obligado no solo a verla desde fuera, también a presenciar el interior. La entrada ronda los 10 euros, pero te prometo que no te arrepentirás.
- El Puente de Alcántara: Saliendo de la parte amurallada nos encontramos con este emblemático puente, que se levanta sobre el río Tajo. Si los ladrillos hablaran, nos podría contar innumerables historias sucedidas hace más de 1800 años.

Y ahora la pregunta del millón… ¿Qué comer en Toledo?
No todo es belleza e historia. También destaca la gastronomía, cosa que rara vez se señala. Te voy a mostrar que hay tesoros más allá del mazapán que brillan tanto como el Alcázar o la catedral.
Carcamusas
Si no te he convencido para ir a Toledo no te preocupes, ahora vengo a atacar en el punto débil de todas las personas, el paladar. Las carcamusas son un plato tradicional castellano que se prepara principalmente en esta maravillosa localidad. El magro de cerdo es guisado con tomate, guisantes y unas pocas guindillas, que le dan ese picor tan característico, aunque bien es cierto que los más valientes le aportan el «calor» añadiendo tajadas de chorizo picante. Si las pides, asegúrate de tener a mano unos buenos trozos de pan porque no vas a querer dejar ni una miaja de salsa en la cazuela.

Perdiz estofada
La perdiz estofada es un plato que guarda muchísima historia. Al contrario que las carcamusas, que son una creación más reciente, la perdiz lleva siendo preparada desde la época romana. Y es que, como bien es sabido, Toledo fue una de las ciudades más importantes durante el imperio romano. Además, debido a la gran afluencia de estas aves por toda su región, es completamente normal que la perdiz estofada lleve siendo desde tiempos inmemorables una de las delicatessen de la ciudad.

Mazapán de Toledo
Y por último, pero no menos importante, tenemos el mazapán toledano. Es de tan suma importancia este dulce para España que recibió la categoría de Indicación Geográfica Protegida en 2002. ¿Y qué le hace tan especial? Pues muy simple, solamente se pueden acoger a esta los mazapanes producidos en la provincia de Toledo y cuyo contenido de almendras dulces sea superior al 50%.
Si te he convencido y ya estás mirando viajes a Toledo, lo mejor es que lo hagas en navidad. Se combinan las luces de la Puerta Bisagra con el olor a churros y mazapán que viaja por todas las calles, impregnando de felicidad a cualquier persona que pase por allí. Además, así aprovechas y compras toneladas de mazapán para pasar la nochebuena. Eso sí, tampoco te lo reserves demasiado, porque al tratarse de un producto tan puro no lleva conservantes. Vamos, que si esperas mucho se acabará quedando duro como una piedra.
