Lo común es utilizar ketchup, mayonesa, mostaza o incluso salsa barbacoa ya preparada en las hamburguesas. Aunque siempre quedarán ricas así y con un sabor clásico, no hay nada mejor que ponerle tu toque personal para que todos los ingredientes en conjunto hagan un plato de diez. Por eso, aquí te traemos nuestra particular salsa Big Mac.
Las hamburguesas de la cadena estadounidense McDonalds son famosas por todo el mundo. Si algo las hace tan irresistibles es esta salsa, que además tiene un secreto: el azúcar. Pocas cosas son más adictivas en el mundo que este, así que tal y como se suele decir, no hay mal que por bien no venga. Pero tampoco te agobies, mientras lleves una dieta equilibrada, siempre podrás darte estos caprichos de vez en cuando.
Lo mejor de todo es que no te tendrás que preocupar por la dificultad, ya que no necesitarás ollas ni nada. Te bastará con mezclar unas pocas salsas y cortar unos pepinillos para tener el acompañante perfecto.
Con las proporciones que te ofrecemos sale salsa para unas cuatro hamburguesas, por lo que si tienes pensado consumir menos disminuye las cantidades proporcionalmente.
Receta de salsa Big Mac para hamburguesas
Ingredientes
- 3 cdas mayonesa
- 1 cda ketchup
- 2 pepinillos en vinagre
- 1 cdta mostaza
- 1 cdta pimienta molida
- 1 cdta cebolla en polvo
- 1 cdta ajo en polvo
- 1/2 cdta azúcar
Elaboración paso a paso
- Picamos en trocitos muy pequeños los pepinillos
- Echamos en un bol las cucharadas de mayonesa, la de ketchup y la cucharadita de mostaza, pimienta, cebolla en polvo, ajo en polvo y azúcar
- Añadimos los pepinillos y mezclamos todo bien hasta que quede una salsa homogénea
- Guardamos toda la salsa en un biberón o cualquier otro recipiente que nos permita conservarla
Notas
- Puedes sustituir la cebolla en polvo por cebolla picada muy finita
Los resultados tras hacer esta salsa Big Mac
Una vez tengas la salsa solo falta el montaje. Nosotros te recomendamos que tuestes las dos rebanadas de pan (o tres, en el caso de que quieras imitar una Big Mac de verdad) y untes un buen puñado de salsa en ambas caras.
Aunque a día de hoy hay un gran número de hamburguesas que se pueden pedir a través de delivery, no hay nada como el sabor a casero y preparar tú mismo lo que luego te comerás. Ve al supermercado, compra tus ingredientes favoritos y haz una creación digna de un estrella michelín. Los únicos límites que existen a la hora de hacer hamburguesas son los que te pones tú mismo.
